domingo, octubre 03, 2010

El hombre contra la naturaleza


En el verano de 2005, cuando el Huracán "Katrina" llevaba un enfurecido paso de destrucción, sólo una noticia que me hizo pensar en la tragedia que muchos seres humanos padecían. CNN informaba que el pionero rocanrolero Fats Domino podía estar entre las víctimas del huracán.

Una vaga nostalgia me invadió. Hacía años que no oía el nombre del músico. Miles de recuerdos se agolparon en mi mente. Como homenaje a su vida artística llena de aciertos, busqué unos viejos discos. Sonaron melodías hermosas, especialmente una dedicada a su ciudad natal “Walking to New Orleans”: I'm walkin' to New Orleans, I'm gonna need two pair-a shoes When I get through walkin' these blues…

Era un acto de injusticia que un hombre que había legado a la música popular una obra trascendental (aunque hoy día casi olvidado) muriera tragado en esa orgía salvaje de agua y viento… ¿qué explicación podía haber que un hombre de su talento desapareciera así, qué mal podía haber hecho?

Pero de la nada, surgía de nuevo Fats rescatado por las autoridades. De acuerdo con las noticias el cantante no dejó su casa, pero no se daba mayor información de las razones para no abandonar el sitio… No sabía que pensar sobre esto. ¿Es que Fats se sentía viejo y le parecía sin sentido salir a salvarse? ¿Era un avaro que simplemente se aferraba a sus bienes materiales?

Ninguna de las dudas que tuve se acercó a lo que realmente sucedió… Fats se quedó en su hogar… por un acto de amor. Su esposa estaba gravemente enferma y no era recomendable su movilización. Durante difíciles horas tuvo que luchar contra la naturaleza, convertida en un demonio sin control, para poder salvarla y salvarse. La fortuna en forma de helicóptero se compadeció de este buen hombre y de su familia.

Estas líneas no son sino un homenaje a ese acto de amor.

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