jueves, enero 31, 2019

Beisbol y tiranía

El beisbol es el pasatiempo preferido de los venezolanos desde hace décadas. Hay una liga profesional (LVBP)y hay unos cuantos venezolanos jugando en las “Grandes Ligas” (MLB) del beisbol de los Estados Unidos. Cuando había dinero de sobra en el país, se trajeron jugadores que luego marcarían récords en la MLB, como Pete Rose o incluso llegarían al “Salón de la Fama”, como Greg Maddux.


En la LVBP hay de momento ocho equipos, pero dos destacan (Navegantes del Magallanes de Valencia y Leones del Caracas), pues son los que más seguidores tienen. Los juegos entre estos equipos son objeto de comentarios, burlas, análisis por parte de propios y ajenos. Los medios los llaman “Los Eternos Rivales”, como si de batallas épicas se tratara.

Por mi parte y por algún tiempo, era seguidor tanto de la MLB como de la LVBP, siendo mis equipos respectivamente los Yankees y Magallanes. Pero perdí el interés por el deporte hace mucho. Apenas si le doy seguimiento al Mundial de Fútbol, que por momentos acapara mi atención cada cuatro años. Esta desgana por el deporte no es producto de algún conflicto moral o ético. Simplemente ya no es objeto de mi interés. Solo algún resquemor me causa ver cómo las dictaduras de izquierda (incluyendo Cuba y Venezuela) tratan de sacar partido de ciertos “éxitos” en el deporte como prueba irrefutable del falso progreso y pretendida inclusión social que esos regímenes alcanzan, cuando en realidad lo que hacen es tomar a alguien con cierto talento, darle dinero y ciertas ventajas, para luego explotar públicamente los “logros”.

Incluso en el beisbol, la dictadura chavista-madurista ha buscado adjudicarse los logros de los jugadores destacados como si fueran fruto de su cosecha, cuando toda la estructura del béisbol profesional antecede a cualquier pretendido logro de su parte en la materia

Pero el béisbol venezolano cayó en la trampa.

Venezuela está pasando por una de las crisis más agudas en más de cien años y el béisbol venezolano no ha sido ajeno a esto, pero por las razones equivocadas. Aun cuando el gobierno tiene una crisis de liquidez importante, ha sido generoso en desviar dólares para la LVBP y esta lo ha recibido sin rubor alguno, aun cuando toda su directiva e integrantes deben estar conscientes de que ese dinero pudo haber tenido un mejor uso, para paliar la terrible crisis económica. Este béisbol traicionero, conociendo las penurias de su gente usa esos dólares para organizar un espectáculo en la Venezuela del hambre, la miseria, la corrupción y la violencia.

Así que con el béisbol ha pasado lo que también sucedió con gran parte de la sociedad venezolana en estos últimos veinte años: para el chavismo consolidarse en el poder precisaba corromper a los suyos y los adversarios. Y la manera fácil de hacerlo fue usar el dinero de la producción y venta del petróleo para comprar y domesticar consciencias. 

Y esa corrupción instigada y promovida desde el poder, usando el dinero del petróleo, ha sido la forma más fácil de limitar y reducir la libertad de un país y de su gente.

La Carta desgraciada

  Esa carta desgraciada Pu ño y letra De mi amada Gualberto Ibarreto El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, decide ausent...